Según un estudio del gobierno, terminar con el financiamiento compartido y el lucro en la educación, que son parte de las propuestas de algunos candidatos presidenciales, afectaría a un millón y medio de estudiantes, y mermaría la calidad de 900 escuelas.
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| PULSO |
Este es el argumento de la Fundación para la Superación de la Pobreza para poner fin a este mecanismo de copago (en un periodo de 6 años) y del lucro en la educación, y ha sido el argumento que históricamente han ocupado los opositores a este sistema.
De hecho,6 de los 9 candidatos a la presidencia hacen suya esta visión y postulan terminar con este mecanismo y avanzar a la gratuidad universal de la educación pública. En tanto, 5 de los 9 postulantes a La Moneda dicen que es necesario poner fin al lucro en la educación.
Pero más allá de estos argumentos hay quienes postulan lo contrario.
CIERRE DE COLEGIOS
El Ministerio Secretaría General de la Presidencia (Segpres) realizó un estudio donde se analizó los efectos de la prohibición del lucro y el copago en la educación escolar. Una de las primeras conclusiones es que “existe una elevada probabilidad de cierre de 2 mil colegios, afectando a casi 800 mil alumnos, y mermando la calidad de otros 900 establecimientos, que forman a más de 650 mil estudiantes”.
De acuerdo a lo que señala el estudio, la distribución de alumnos entre los colegios particulares subvencionados con y sin fines de lucro es homogénea: considerando a quienes rindieron el SIMCE en 2012, los establecimientos sin fines de lucro concentran un 52,7% de la matrícula, y los que sí tienen dichos fines, un 47,3% (ver gráficos).
De este modo, indica el análisis, los colegios particulares subvencionados constituidos como sociedades comerciales atienden al 26% de los escolares de Chile, es decir, más de una cuarta parte de los mismos, que equivale a no menos de 800 mil alumnos.
El estudio agrega que 3 de cada 4 establecimientos particular subvencionados ocupan el sistema de copago.
Frente a estos datos, desde la Segpres aseguran que es muy difícil que con la prohibición de este mecanismo una sociedad comercial opte por convertirse en una institución de beneficencia, puesto que dichos sostenedores cuentan con la retribución que reciben como fuente de ingreso.
“No hay ninguna exageración en afirmar que la prohibición efectiva del lucro en la educación escolar subvencionada tendría como segura consecuencia el cierre de la casi totalidad de los colegios particulares subvencionados que actualmente lo obtienen”, dicen en la Segpres.
Si bien, el estudio señala que es menos probable que los 900 colegios particulares subvencionados cesen sus funciones, “sí es un hecho concreto que esos colegios pasarán a contar con menos fondos y que, por lo mismo, la calidad de la educación que entregan corre un elevadísimo riesgo de empeorar”.
En suma, al menos un millón y medio de escolares, equivalentes a alrededor del 47% de toda la matrícula escolar resultarían afectados, ya sea debido al cierre de sus colegios o a la reducción de sus fondos y la consiguiente merma en calidad.
RESULTADOS DE CALIDAD
De acuerdo al análisis realizado por la Segpres y comparando datos del Simce 2012, “los establecimientos con fines de lucro tienen, en promedio, mejores resultados que los municipales”.
Un ejemplo de ello son los resultados en las pruebas de Lenguaje y Matemáticas de los 2° medios. En un establecimiento municipal los resultados fueron 244.36 y 241.05, respectivamente. En el caso de un colegio particular subvencionado con fines de lucro los puntajes fueron 255.50 y 262.26.
Sin embargo, los establecimientos particular subvencionados sin fines de lucro obtienen mejores resultados. En la prueba de Lenguaje para 2° medios fue de 265.89 y en Matemáticas de 274.63.
Ante esto, el gobierno postula que “una política que lleve a migrar a los alumnos de los colegios particulares subvencionados con fines de lucro a establecimientos municipales, significaría obligar a varios cientos de miles de alumnos a estudiar en colegios de peor calidad. Todo ello además de la merma en calidad que ya vimos supondría también la reducción del copago”.
DAÑO A GSE MEDIOS Y MEDIO BAJOS
Los establecimientos municipales, indica el documento, acogen principalmente a alumnos de Grupo Socioeconómico (GSE) medio-bajo y bajo (78% de la matrícula municipal pertenece a esos grupos), mientras que los particulares subvencionados atienden principalmente a estudiantes de GSE medio y medio-bajo (68% de sus alumnos pertenecen a esos segmentos).
A su vez, la matrícula de los establecimientos con fines de lucro es cuantiosa en los sectores medio (43%) y medio-bajo (28%).
De esta manera, aseguran que “una eventual prohibición del lucro afectaría principalmente a niños y jóvenes de familias de estrato socio-económico medio y medio-bajo, es decir a la clase media y media vulnerable, que se verían obligados a optar por una educación estatal generalmente de peor calidad”. Y agregan que la prohibición del copago afectaría a familias de estrato medio y, en menor medida, medio-alto.
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