La Central Unitaria de Trabajadores (CUT), La Confederación Gremial (Conupia) y el senador DC Andrés Zaldívar, de la comisión de Hacienda del Congreso, criticaron la tardanza y falta de diálogo por parte del gobierno de Sebastián Piñera para crear una institucionalidad que fije el salario mínimo de los trabajadores. No obstante, esperan que el proyecto se lleve a cabo en el gobierno entrante.
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| Diario Uchile |
El Ministro de Hacienda, Felipe Larraín, anunció ayer el envío de la iniciativa que tiene por objetivo conformar un comité de ocho expertos, nominados por el presidente y ratificados por el Senado, que entregarán una propuesta de salario mínimo anual desde el titular de Hacienda, para luego entrar en discusión legislativa.
Mejorar el poder adquisitivo de los trabajadores acorde a los factores económicos como productividad, desarrollo y alto nivel empleo sería la tarea de la nueva institucionalidad, aseguró Larraín.
Iván Vuskovic de la Confederación Gremial Conupia, que agrupa a pequeñas y medianas empresas, sostiene que teniendo en cuenta el número de trabajadores, productividad y las ganancias, se puede llegar a la determinación de un salario mínimo que sea progresivo.
Igualmente, Vuskovic identifica diferencias entre las empresas tanto por su rubro como por tamaño.
Al respecto aseguró que “no se puede llegar y establecer una cosa por igual, pero justamente esos son los trabajos que tiene que hacer una comisión de esa naturaleza, para establecer por ramas y por regiones, salarios diferenciados. Porque no es lo mismo un salario mínimo en una minera a cuatro mil metros de altura que en una región al interior de la sexta región en labores agrarias. Porque además los costos de vida son distintos”, dijo Vuskovic.
Para el vicepresidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Nolberto Díaz, la iniciativa es impresentable. A su juicio, lo único que se busca es dejar amarrada una discusión.
“Yo creo que no se ha hecho antes, porque a este gobierno, particularmente, no le gusta mucho la participación democrática, no consulta y hace las cosas a su gusto. Prueba de lo anterior es que durante cuatro años, la Central Unitaria de trabajadores no pudo discutir con Piñera el salario mínimo”, aseguró Díaz.
Díaz agrega que lo ideal sería que la mayoría de los chilenos pudiera acceder a una negociación colectiva, tal como sucede en países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), instancia limitada en el acontecer nacional.
Respecto de la viabilidad del proyecto al interior del parlamento, el senador demócrata cristiano, Andrés Zaldívar, de la Comisión de Hacienda, desaprobó que no existiera ninguna conversación previa con el nuevo gobierno para darle continuidad a la iniciativa.
“Es un proyecto de ley que tiene muy pocas posibilidades de trámite, porque se va a presentar seguramente para darse cuenta en la primera sesión del senado, la cámara de diputados y una vez que se de cuenta ya pasan a la próxima semana que es el once de marzo, donde ya va haber un nuevo parlamento. Lo que ha hecho el ministro es más que nada un saludo a la bandera”, explicó Zaldívar.
Además, el congresista reprobó que la propuesta del grupo de expertos no considere la participación de ningún representante de organismos gremiales, quienes pueden verse afectados por el salario mínimo.
Respecto a la nueva autoridad. Según se sostiene en el programa de gobierno de Michelle Bachelet, existe un compromiso en la creación de una instancia técnica que asesore al gobierno y analice el mercado de trabajo, eso junto a establecer consulta a organizaciones nacionales de empleadores y trabajadores.
Adicionalmente, aventura que dentro de los márgenes de crecimiento previsto, el reajuste al ingreso mínimo debe alcanzar los 250 mil pesos a mediados del próximo periodo presidencial.
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